lunes, 5 de noviembre de 2012
Las puertas abiertas
mi talón de aquiles renguea
mis ojos que lo ven todo piden clemencia
mi boca sin gusto a vino
mi casa a medias
los grillos que no cantan
mi casi sonrisa
mi quizás
mis certezas
las piedras nuevas
la vela encendida
la música de Lorena
los óleos quietos
la tinta que trata de saldar las penas
desear que algo suceda
bajar y subir los sentidos
rezarle a la virgen de los colores
rozar las cortinas con mi cuerpo
temblar cuando te pienso
secretear con un angel
dibujar círculos
engendrar amores que trasciendan
vivir acompañada de un amor que perdure
mientras bailo sobre mi amado pasto mojado.
Siempre
siempre
siempre
las puertas abiertas.
Analia.-
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