La claraboya ya nos
convertia en mendigos
a la luz del dia....
igual que a la Cenicienta
las doce campanadas
que la perseguian.
Me pregunto porque
nos convertimos en lo
que no somos ni fuimos.
Me pregunto que es lo
que nos hace temer
si lo desconocido
o si nos tememos a
nosotros mismos.
Me pregunto porque
aveces nos atragantamos
con palabras
y encima las digerimos
sin tomar agua.
Me pregunto porque
sentimos que si no sufrimos
no vivimos....
Necesito intentar algo
que me haga olvidar la
agitacion de las horas pasadas,
para Recomenzar una historia
que no me convierta
en otra cosa
que no me convierta en nada.
Quiero acurrucarme en un sillon
y fichar mi geografia,
quiero acurrucarme en un sillon
y dejarme llevar
por lo que realmente vibra...
Quiero acurrucarme en un sillon
y reirme de los argumentos
que me invente
hasta este momento.
Analia Gabriela Ferrari.-
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